La UHE fomenta un entorno laboral basado en la ética, la empatía y la solidaridad, para el bienestar de sus colaboradores.
La UHE se destaca por fomentar un entorno laboral que prioriza la ética, la empatía y la solidaridad como pilares fundamentales para el bienestar de sus colaboradores. Este enfoque se materializó recientemente durante la charla de formación humanística llevada a cabo el pasado 22 de abril, bajo la tutela del padre Juan Miguel Rodríguez, capellán de nuestra universidad.
El evento, dirigido específicamente a la unidad administrativa financiera de la UHE, sirvió como espacio para reflexionar sobre la importancia de la vida moral en el contexto cristiano. El padre Juan Miguel abordó la necesidad de integrar principios éticos cristianos tanto en el ámbito laboral como en el personal, reconociendo así la interconexión entre ambos aspectos de la vida de los colaboradores.
Uno de los puntos centrales de la charla fue la relevancia de los 10 mandamientos como guía ética para la toma de decisiones cotidianas. Se resaltó cómo estos principios fundamentales pueden orientar las acciones de los colaboradores en el ejercicio de sus responsabilidades laborales, promoviendo una cultura organizacional basada en valores sólidos y perdurables.
Además, se profundizó en el significado del bautismo y la eucaristía en la vida diaria de los colaboradores. Estos sacramentos fueron presentados como fuentes de inspiración y fortaleza espiritual, capaces de influir positivamente en la forma en que los individuos enfrentan los desafíos del día a día en el trabajo y en su vida personal.
La charla no solo se centró en aspectos teóricos, sino que también se hizo hincapié en la aplicación práctica de estos principios en el entorno laboral. Se alentó a los participantes a reflexionar sobre cómo pueden integrar los valores cristianos en sus interacciones diarias con colegas, clientes y demás actores del ámbito laboral.
El padre Juan Miguel enfatizó la importancia de cultivar el amor a Dios como motor de todas las acciones, tanto dentro como fuera del lugar de trabajo. Esta perspectiva trajo consigo un mensaje de unidad, solidaridad y respeto mutuo entre los colaboradores, independientemente de sus creencias individuales.
La charla de formación humanística fue un espacio enriquecedor que permitió a los colaboradores reflexionar sobre la importancia de integrar principios éticos cristianos en su vida laboral y personal. Más allá de ser un evento aislado, esta iniciativa refleja el compromiso continuo de la institución con el desarrollo integral de sus empleados, promoviendo así un ambiente de trabajo basado en valores que trascienden lo meramente profesional.

